Nuestros héroes

En esta sección hablaremos de héroes. Los nuestros.

Nuestro primer gran héroe, faltaría más, es el inventor de la lavadora. Cualquier día de incontenible inspiración le dedicaremos un bonito poema. Lamento decir que ese día no ha sido hoy.

Nuestro segundo gran héroe es un hombre anónimo para la mayoría pero no para nosotros, que sabemos bien quién es e incluso dónde habita. El superpoder de este hombre que, curiosamente no sale en la tele, es su maestría para hacer el estofado de cazón. El estofado de cazón, aparte de estar endiabladamente sabroso, tiene la propiedad de levantar a un muerto y asentar el estómago más vapuleado (sic). Os recomendamos no pasar por la vida sin probar un buen estofado de cazón. Por cierto, el que se anime que avise, que a mí, éste me supo a poco.

Un estofado de cazón en todo su esplendor

Nuestro tercer gran héroe es el ilustre romano Tiberio. Pese a su mirada algo extraviada y sanguinaria, hemos de decir que fue extremadamente atento cuando visitamos su casa allá por tierras extremeñas durante nuestras andanzas por esos mundos de Dios. Su hospitalidad ejemplar le hace digno en entrar en el número 3 de nuestra lista más heróica, y bien tiene merecida una visita para recitar a Virgilio mientras se disfruta de unas cuantas rondas de su bebida favorita

Tremenda mirada. Pero no os dejéis intimidar. En el fondo es tierno y muy amigo de los niños.

Si tenéis algún héroe muy vuestro que queráis ensalzar, quizá éste sea el momento de enviar un email a cajoneradesastre@yahoo.com con vuestros superhéroes.