11 febrero 2008

Play it once, Sam

Nuevamente movidos por el por el poderoso influjo de Mr. Hernández, damos entrada a una serie de temas que hay que tocar, por lo menos una vez.
Television de Hard-Fi. A falta de otro, ponemos el vídeo de un ser humano que se lo ha currado bastante.


Berlín, un temazo de BRMC. Nos gusta tanto que lo ponemos sin vídeo ni ná.


And last but not least important, Bring the light de Smashing Pumpkins.

5 comentarios:

Yago dijo...

Me estoy empezando a sentir como una persona influyente...
Pues sí, el segundo disco de Hard Fi es también muy bueno. Gente con talento y que piensa; este grupo apunta alto.

BRMC son una banda fantástica cuyo primer disco no he llegado a escuchar pero que me enganchó de forma tremenda en el segundo. Luego sacaron el "howl" para volver por sus fueros con este magnífico "Baby 81" (para ver Berlin con vídeo, http://es.youtube.com/watch?v=Hso2CC1ozPs&feature=related).
Y lo que tenía que decir del regreso de los Pumpkins lo dije en mi post Zeitgeist: gran disco el de su regreso aunque ya no estén de moda y no quede bien decirlo.
Besos

Suzette dijo...

pues ya te lo puedes empezar a creer. Eres el único hortera del colmillo que cree que otro mundo mejor es posible. Admiro lo que no se lleva. Seguiremos informando y seguiremos con la lista.

Suzette dijo...

Ah, hoy alguien muy versado sobre el tema me dio una auténtica clase de cómo funciona el mundo. Demoledor. Sin fé no hay esperanza. Y sin esperanza, no hay nada. Y eso, no puede ser.

Yago dijo...

Un optmista cree que vivimos en el mejor mundo posible. Un pesimista teme que eso sea verdad.
Yo no sé si soy uno u otro, o simplemente ingenuo pero creo que algo se puede hacer para cambiarlo. Y eso intento, aunque sea de forma muy liviana.

Suzette dijo...

No sé si es consciente de que la conciencia social no se lleva nada excepto en discursos, periódicos, reuniones sociales y letras de músicos "trasnochados". En un mundo donde la conciencia individual reina a su antojo, su actitud es un diamante. Y la maltrecha ingenuidad, delicatessen.